Aprovechando que la que es probablemente la revista de manga más famosa de Japón -y del mundo- cumple 50 años (el tiempo pasa volando…), realizamos este top especial en el que daremos cabida a diez de los puntales más importantes del semanario. Para ello, hemos tenido en cuenta los siguientes factores: que haya sido/se esté publicando en España; su popularidad; sus ventas; y, por supuesto, su calidad, tanto artística como argumental. Sin más dilación, “piratas”, ¡adentrémonos en el mundo de la Jump!
10. Medaka Box
A pesar de su tremendísima calidad artística (el dibujo de Akatsuki es increíble, limpio, pulido, detallado) y argumental (con NisioIsin al frente no podía ser de otra forma), el manga no gozó en España del favor que quizá debiera. Posiblemente se deba a su densidad narrativa, su extensísimo plantel de personajes y el hecho de que revierta todos los tópicos de un género que nos sabemos de pe a pa. En cualquier caso, hay que aplaudir su labor: no es fácil publicar en la Jump y hacer un manga machacando todos sus clichés de las formas más extravagantes y divertidas, al menos sin abandonar ese toque serio y reflexivo que acostumbra a tener el autor en sus obras.
9. Slam Dunk
Bien es cierto que la cantera de mangas deportivos de la Jump es muy extensa (ahí tenemos Captain Tsubasa para recordárnoslo, o The Prince of Tennis, o las más actuales Kuroko no Basket y Haikyuu), pero si hay una obra que caló fuertemente en el público por su calidad narrativa y sus tremendamente carismáticos personajes fue Slam Dunk.
Bien es cierto que el spokon (manga deportivo) no suele contar con buenas ventas en España (sin ir más lejos, los anteriormente mencionados The Prince of Tennis y Tsubasa fracasaron notablemente), pero Slam Dunk consigue, como el buen vino, hacerse incluso mejor con el paso de los años. Un referente y obra de culto.
8. JoJo’s Bizarre Adventure
Parecía que nunca llegaría, ya se nos antojaba imposible ver algún día esta extensísima obra en nuestro país. Pero llegó Ivrea y soltó la bomba. Tras años de peticiones, firmas y quejas, las aventuras de los Jojo´s llegaron, divididas en arcos argumentales para facilitar su compra, y con una edición cuidada que ciertamente recuerda a la de Viz Media. Sus ventas parecen estar acompañando, por lo que esta vez la masa de fandom sí está respondiendo a lo que pedía. No solo en España es una obra de culto: en Japón prácticamente todo el mundo la conoce, bien sea porque distintas generaciones ha crecido con ella y otras se han ido sumando con el tiempo, o porque su característico estilo gráfico, sus poses y su culturismo hipervitaminado han traspasado las fronteras de la Cultura Pop y han sido referenciadas en múltiples ocasiones incluso a día de hoy. Un clásico atemporal.
7. Rurouni Kenshin
No nos engañemos, el manga de samuráis siempre ha parecido quedar relegado a un público bastante nicho, interesado por el género y por la historia que hay detrás. La situación pareció cambiar con la llegada de Kenshin, que llevó el género al público más mainstream y se convirtió en una de las obras más queridas de la revista; no en vano, sigue siendo hoy la obra más popular de su autor, y ha publicado ya unas cuantas…
Eso sí, las impúdicas y deleznables acciones cometidas por Watsuki no se olvidan, pero tampoco podemos ignorar la popularidad y repercusión que ha tenido esta obra. Tiene que estar en este top.
6. Hunter x Hunter
También recordamos con cariño, por supuesto, YuYu Hakusho, otras de las obras de Togashi querida por sus seguidores. Pero si hay una cuya popularidad ha trascendido la revista y que nos sigue haciendo rabiar hoy día por su lento ritmo de publicación, debido a la conocida vagancia del autor, esa es Hunter x Hunter.
Sin embargo, tampoco podemos achacarle mucho, ya que la calidad de la obra es tal, y resulta tan sumamente interesante, que sólo podemos comernos las uñas esperando la siguiente entrega de las aventuras de Gon y compañía. Esperemos que no tarde mucho en darle un final; mientras tanto, no diremos que no a más historias de este apasionante shônen.
5. Bleach
Más dura será la caída…
Así podríamos definir el recorrido de la obra de Kubo, un shônen que arrasó en sus inicios, mirándose casi de tú a tú con Naruto. Una trama que prometía, con personajes interesantes y un estilo artístico que mejoraba a pasos agigantados (si en algo destaca el autor, además de la notable ausencia de fondos, es en la creación de personajes con pulso arrollador). Todo parecía prometer maravillas, pero la longitud de la propuesta hizo mella rápidamente: los arcos argumentales empezaban a ser repetitivos, la trama principal parecía casi olvidada y todo se convertía en una sucesión de combates que, pese a resulta entretenidos, no nos dejaban ahondar en la trama verdadera, en el secreto de la familia de Ichigo y su pasado.
Pese a todo, ignoremos las lacras que posee Bleach y recordémosla por lo que fue y por esos buenos momentos que nos ha dado Kubo con su obra. ¿Qué será lo siguiente? Lo esperamos con ganas.
4. Death Note
El tándem Ohba–Obata nos ha dado grandes obras (ahí está la increíble Bakuman, quién nos iba a decir que un manga sobre el manga iba a resulta tan genuinamente interesante y entretenido), pero sin duda aquella que más popular se hizo, con más recorrido internacional y ventas, es Death Note.
Los juegos psicológicos de Kira y L serán recordados siempre, y este clásico moderno del manga ha contado con numerosas adaptaciones (algunas más logradas que otras, ¿verdad, Netflix?), referencias, secuelas, spin-offs en forma de novelas… Cuando una obra genera tanta ruido a su alrededor, es por algo, y Death Note supo mantenernos enganchados irremisiblemente a su oscura trama e hizo que la palabra spoiler empezara a resonar con fuerza en redes sociales, generando algún que otro enfado cuando, sin querer, nos comíamos alguno.
3. Naruto
¿Qué decir de las aventuras del ninja butanero? No en vano apodado uno de los sucesores de Dragon Ball, quién le iba a decir a Kishimoto que las aventuras de un ninja travieso adolescente darían para tanto. Su legado sigue vivo con su hijo Boruto, y muchos de nosotros hemos crecido con Naruto; a él le debemos nuestro interés en el manga, que empezáramos a curiosear y mirar qué hay más allá y, en definitiva… que ahora seamos lo que somos.
Desde luego, a pesar de su polémico final que ha generado divisiones, las aventuras del equipo de Kakashi ha mantenido durante años una fuerte comunidad de fans que esperaba con ansias el siguiente capítulo. La obra consigue mantener el tipo durante sus 72 tomos, pese a algún que otro traspiés que se solventa pronto, e incluso logra darnos algunos de sus mejores momentos cerca del final. Pero no os confundáis, el espíritu del Hokage de la Villa de Konoha sigue vivo, con la publicación por parte de Planeta de su secuela así como de las numerosas guías para los fans más ávidos.
2. One Piece
Sus números resultan arrolladores, y la cantidad de gente que consigue arrastrar este fenómeno (porque ya no tiene otro nombre), es abrumadora. Cada estreno de un tomo se cuela irremediablemente en el primer puesto de la lista, y ahí permanece reinando durante casi semanas. Y cada nueva película atrae a una masa ingente de espectadores a las salas para disfrutar de una nueva aventura de la banda del Sombrero de Paja.
Y no es para menos. Eiichiro Oda ha creado una obra atemporal, casi una religión en Japón, donde podemos ver a Luffy y sus nakamas prácticamente en todas partes. ¿Y es merecido este éxito? Pues rotundamente sí. Existen muy pocos mangakas que posean la creatividad, el ingenio y el pulso narrativo que tiene Oda, un genio capaz de manejar diversas tramas de forma brillante y hacer referencia a hechos que parecían olvidados incluso por el lector más atento para rescatarlo con acierto mucho después.
One Piece es sinónimo de calidad, de genialidad y de buenas historias. Es sinónimo de pasión.
1. Dragon Ball
Akira Toriyama lo cambió todo. Pocas veces ha existido un fenómeno como Dragon Ball, capaz de unir a chicos y chicas de diversas edades frente al televisor y disfrutar de las aventuras de Goku y sus amigos. Pocas veces un producto de ficción ha aguantado tan sumamente bien el paso del tiempo, haciendo incluso que algunos, ya rozando la cuarentena, sigan acudiendo a su tienda para ver qué es lo siguiente que nos ofrece Toriyama, qué nueva historia va a protagonizar el Saiyajin.
Ingentes cantidades de productos de mercadotécnica rodean Dragon Ball (toallas, videojuegos, muñecos, figuras, películas, ropa, cosméticos, tecnología, novelas…). Todo lo que puedas imaginar tiene su versión correspondiente con los personajes de esta obra de culto. Seguro.
Sus ventas resultaron arrolladoras, e inesperadas, incluso en España, donde Planeta tuvo que reimprimir ejemplares a ritmo de vértigo; todo el mundo quería formar parte de esta historia, todos querían sumarse a esta dulce locura.
Y aquí estamos, casi 20 años después, todavía viendo en nuestras pantallas nuevas aventuras de Goku, todavía sonriendo como aquel niño pequeño frente a su televisor, imitando las poses y realizando kamehamehas en el salón. Gracias por tanto.
¡Y hasta aquí nuestro repaso a las obras más destacadas de la historia de la revista! Por cierto, si os interesa saber de primera mano cómo se elabora la revista, Norma acaba de editar un libro muy interesante que nos cuenta este laborioso proceso de una forma divertida y simpática: Cómo se hace la Jump.
Sabemos que hemos dejado muchas fuera, y quizá algunas de vuestras favoritas, pero para eso tenemos las redes sociales, ¿no? Contadnos por Twitter cuál es vuestro TOP 10 de obras de la Jump, usando para ello el hagstag #JumpTop10 y mencionando cualquiera de nuestras cuentas. ¡Compartamos la pasión por la Shônen Jump!
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