Nuestra guía manga continúa su camino con la presencia de Yuhki Kamatani y Yukiru Sugisaki, dos autoras muy destacadas aunque por razones bastante diferentes.
YUHKI KAMATANI
Esta joven autora manga destaca por la enorme variedad de temáticas que trata en sus obras. Así, por ejemplo, en Shonen Note explora los sentimientos que experimenta Yutaka, un joven con el don de la sinestesia que, al cambiarse de instituto, deslumbra a todos con su increíble voz; pero la adolescencia es una época difícil, como pronto descubrirá.
Si créeis que no se puede expresar música y sonido mediante una página escrita (dibujada en este caso), este manga os demostrará lo equivocados que estáis: a través del trazo claro y limpio de la autora percibiremos las notas de cada página con algo más que nuestros ojos.
Si buscáis algo radicalmente distinto, Tomodomo está publicando también Sombras sobre Shimanami, una serie de tan sólo 4 tomos que explora las vicisitudes a las que deben hacer frente una serie de jóvenes LGBT en el Japón actual; sin duda, una obra necesaria, transformadora y que se debería leer.
Hay otra pieza de la autora que, por el momento, sigue inédita en nuestro país, pese a que las peticiones ya han perdido fuerza. Hablamos, claro está, de Nabari no Ou, cuya publicación vemos cada año más difícil.
YUKIRU SUGISAKI
Esta mangaka encarna la perfecta definición de lo que llamamos procrastinación. Cuenta en su haber con bastantes obras publicadas en nuestro país, todas ellas traídas por Ivrea, pero algunas de ellas siguen todavía sin contemplar un final.
De las que sí están finalizadas podemos destacar Brain Power’d, curiosa y extraña obra que combina los mechas con la ciencia-ficción alienígena de forma bastante original. Es difícil de encontrar a día de hoy, pero si la halláis, tendréis una serie amena en 4 tomos.
Por otro lado, el tomo único Eden nos presenta una historia apocalíptica donde Japón se ve asolada por desastres nucleares, contaminación y numerosas epidemias. Un tomo bastante alejado de lo que suele hacer la autora.
Respecto a las series no terminadas, sin duda la más demandada y aclamada por público y fans es DNAngel, obra que la dio a conocer en nuestro país y que, tras más de 10 años, sigue sin visos de un final. Por no mencionar Lagoon Engine, que incluso la propia Sugisaki parece haber olvidado, que con 7 tomos a su espalda sigue interrumpida desde 2009.
¿Perdemos ya la esperanza de disfrutar el final de estos mangas?
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