Sigue las nubes al nornoroeste
Seinen, misterio, slice of life
Norma Editorial
Septiembre de 2019
Rústica
248
Miyama es un joven detective de 17 años que vive en Islandia. Aparte de sus obvias dotes para la deducción, tiene un curioso poder: es capaz de comunicarse con los automóviles, un don que le será muy útil en alguno de sus casos...
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Tras el maravilloso Ran y el mundo gris, Aki Irie vuelve a combinar la magia, el costumbrismo y la emoción con este curioso manga sobre un joven detective capaz de hablar con los automóviles. El escenario exótico de Islandia añade encanto a la adictiva narración de la autora, lo que combinado con su dibujo casi onírico impregna de una personalidad especial a la historia.
Irie tiene talento para mezclar conceptos muy cotidianos con otros excepcionales, por lo que demuestra una gran facilidad a la hora de cambiar intercalar humor con drama, así como pasajes contemplativos con otros intensos; la peculiar premisa argumental llama poderosamente la atención, y, aunque el don del protagonista pueda sonar un poco simple, se integra de forma natural en la narración.
Aunque la ambientación sea muy diferente a la de Ran y el mundo gris, la delicadeza en el dibujo se mantiene, con una composición de páginas clara y dinámica que sabe aumentar la intensidad cuando procede, creando un llamativo contraste entre ese tono casi etéreo y los momentos de acción y violencia. Como es obvio, en esta ocasión la autora presta especial atención a los gélidos paisajes de Islandia y a los diseños mecánicos de los coches, que resaltan con respecto a los trazos más elegantes de los personajes.
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