En los últimos años, han empezado a publicarse varios títulos muy populares en la Shonen Jump. No podemos obviar, por ejemplo, el fenómeno de Kimetsu no yaiba (Guardianes de la noche en España), que ha arrasado en Japón. ¡Ha batido infinidad de récords! Pero hay muchos más que se han ganado a pulso el interés de los lectores. Hoy en el blog de Otaku Center queremos hablaros de uno de ellos. Un shônen muy particular que combina ciencia ficción y aventura, acción y ciencia: Dr. Stone, que cuenta con guion de Riichiro Inagaki y dibujo de Boichi. Si no lo habéis leído aún, os damos unos cuantos motivos por los que merece la pena adentrarse en sus páginas.
Dr. Stone: una historia original en una nueva edad de piedra
¿Qué pasaría si, de repente, la civilización tal y como la conocemos dejara de existir? Ese es el punto de partida de la interesante trama de Dr. Stone. Todo comienza con un inesperado resplandor que petrifica a toda la humanidad… Y no empieza a despertar de su letargo hasta miles de años después. Para entonces, el mundo que había logrado levantar ya no es el mismo, y el desarrollo tecnológico que había conseguido es cosa del pasado.
El ser humano ha vuelto a la casilla de salida y tiene que reconstruirlo todo de cero. Pero Senku, un genio de la ciencia, y su amigo Taiju no están dispuestos a rendirse. Empiezan a buscar entonces una manera de devolver la vida al resto de estatuas. Mientras, persiguen otro objetivo: hacer que la humanidad recupere su desarrollo tecnológico. Promete, ¿verdad?
¿Qué pasaría si, de repente, la civilización tal y como la conocemos dejara de existir?
Pero la historia que plantea Riichiro Inagaki no es solo original por ese reto, imposible en apariencia, al que tienen que enfrentarse sus protagonistas. Pronto se dan cuenta de que no es el único obstáculo en su camino. Cuando despiertan a Tsukasa, un chico de gran fuerza, para que los proteja, se percatan de que no todo el mundo comparte su punto de vista.
Senku y Taiju quieren traer de vuelta al resto de la humanidad sin excepción; Tsukasa es partidario de despertar solo a los jóvenes de corazón puro. Así, se plantea un dilema muy sugerente que vuelve la trama aún más emocionante. La rivalidad que se establece entre ambos y los intentos de Senku por recuperar su antiguo mundo consiguen que el lector se enganche… y quiera más y más a medida que se van desvelando secretos y se alcanzan nuevas metas.
Una solución poco común para todas las dificultades: la ciencia
Este es otro de los puntos más originales de Dr. Stone: la ciencia es un pilar fundamental en la historia. Senku, el protagonista, siempre sintió interés por ella. Y es un genio capaz de utilizarla para hacer realidad cualquier cosa, por imposible que parezca en el nuevo mundo. Es también el remedio para cualquier obstáculo. Lo que en otros mangas se resuelve mediante una pelea y poderes sobrenaturales en Dr. Stone se soluciona con ingenio y conocimiento científico.
A lo largo de la historia, los personajes nos ofrecen datos sobre química, física y otras disciplinas que les sirven de ayuda ante cualquier problema. Como lectores, nos emocionamos con sus avances, queremos ver qué más se les ocurre para reconstruir la civilización que tan bien conocemos. Dr. Stone es un manga lleno de amor por la ciencia, y sus autores saben trasmitírnoslo muy bien.
El motor de la historia: unos personajes que cautivan
Para que una historia funcione, no solo se necesita una trama que enganche y mantenga el interés: también son imprescindibles unos buenos personajes. Y Dr. Stone los tiene, empezando por Senku, el carismático genio de la ciencia cuyo objetivo es reconstruir la civilización de cero. Un chico un tanto peculiar que nunca se rinde, por muy difícil que sea una situación. ¿Y qué decir de sus compañeros? El inocente Taiju, la amable Yuzuriha, el misterioso Gen, la valiente Kohaku, el curioso Chrome… Son muchos los que se unen a él y a su reino de la ciencia, cada uno con su papel en la trama, con sus cualidades y su granito de arena que aportar.
Por supuesto, hay que mencionar también a los antagonistas. Tsukasa se erige desde el principio como el primer rival de Senku porque su visión del mundo difiere. Y es que ambos quieren recuperar su mundo, pero de una forma muy distinta. Tsukasa es un adversario difícil de batir, y tanto él como los suyos suponen un obstáculo para el reino de la ciencia. Pero aún hay más… Por no destriparos el manga, solo diremos que, según avanza la historia, aparecen nuevos contrincantes a los que Senku y sus amigos deberán hacer frente. Si buscáis una historia con buenos personajes, Dr. Stone es una elección segura.
Retratar el fin de una civilización: el impresionante dibujo de Boichi
Una última razón por la que disfrutar de Dr. Stone es el dibujo. Es Boichi quien se ha encargado de trasladar la historia de Senku y sus compañeros a viñetas. Y lo hace muy bien, tanto en lo que respecta a los personajes como a la ambientación. Los protagonistas de Dr. Stone están dotados de una gran expresividad porque Boichi sabe cómo transmitir lo que quiere. Miedo ante los enemigos o la incertidumbre. Emoción por los avances que consigue el reino de la ciencia. Nostalgia por el mundo que muchos de los personajes dejaron atrás. Su estilo también está muy logrado en las escenas de humor y consigue que el lector esboce una sonrisa.
Pero además Boichi despliega su imaginación a la hora de mostrarnos el mundo de piedra en el que Senku y sus compañeros abren los ojos. Esa Tierra en la que ya no hay coches ni edificios de impresión. Esos lugares de los que la naturaleza se ha adueñado de nuevo. Y, por supuesto, las muchas locuras que salen de la mente brillante de Senku en su intento de recuperar la civilización. Boichi nos permite reimaginar infinidad de objetos a los que estamos tan acostumbrados que, muchas veces, nos costaría vivir sin ellos.
¡Hasta aquí el artículo de hoy! ¿Os hemos convencido para que le deis una oportunidad a Dr. Stone? ¿Lo habéis hecho ya? Como siempre, os leemos en comentarios y en nuestras redes sociales.
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