MANGA OPINION RESEÑAS

[Reseña] Happyland

Shūenchi (終園地) Book Cover Shūenchi (終園地)
Happyland
Shingo Honda
Seinen / Terror, Gore, Drama
Arechi Manga
5 de diciembre, 2023
Tomo doble B6 (128x182) rústica (tapa blanda) con sobrecubierta
348 págs. B/N

Los Komiya son una familia feliz, sin problemas... ¡o eso es lo que parece hasta que entran en el parque de atracciones y todos sus secretos familiares quedan al descubierto! Porque en Happyland quien maneja el telón es Mr. Rabbit, y todo terminará en tragedia si tu familia está a punto de desmoronarse.

Para salir de este parque, ¡deberán confesar sus más terribles secretos y que la familia no se rompa! ¿Lograrán escapar?

VAMOS A PASARLO DE MIEDO

Nada mejor que un parque de atracciones para relajarse y liberar tensiones, ¿verdad? La adrenalina, la emoción, la euforia… Un conjunto de sensaciones que nos ayudan a liberar endorfinas mientras a la par nos deshacemos de ese exceso de cortisol que pone nuestro cuerpo en tensión y no nos deja vivir (aunque también nos salva en situaciones desesperadas). La familia protagonista de esta historia, los Kamiya, también pensaron que acudir a Happyland, un extraño pero sugerente parque de atracciones, sería una bendición. Sin embargo, su sorpresa al llegar allí resulta de todo menos eso. Más bien lo contrario. Sus asistentes, familias todas casualmente, son recibidos por un extraño conejo siniestro que les promete que alcanzarán la verdadera felicidad en su parque temático. Para ello, solo deberán montarse en una serie de atracciones y ser quienes realmente son. Y ahí está la trampa… ¡Bienvenidos a este particular parque de atracciones, bienvenidos a la reseña de Happyland!

Off with your head!

CON LA MUERTE EN LOS TAZONES

Y es que, extrañamente, todo es gratuito en Happyland. Algo que para los más tacaños es toda una alegría. Sin embargo, Kenji, el cabeza de familia, lo ve algo raro. Yo también lo haría, desde luego, dado que el capitalismo impera en nuestra sociedad. ¿Cómo va a ser gratis algo de ocio cuando algunos gobiernos quieren cargarse la sanidad pública de formas poco sutiles? (Y hasta aquí mi TED Talk política sin nada que ver con esta reseña).

La cuestión es que cuando la peña empieza a morir a troche y moche (me encanta esta expresión), la familia Kamiya decide que quizá sería óptimo escapar de ese parque. Lástima que ya sea demasiado tarde. Pero no pasa nada, todo estará bien siempre y cuando disfruten de las maquiavélicas atracciones y sean honestos con los suyos.

Y es que en este Happyland, la única forma de sobrevivir es decir la verdad. Qué fácil parece, ¿eh? Pero no, mi ciela. Todos guardamos secretos, incluso a los que más queremos. ESPECIALMENTE a los que más queremos. Resulta mucho más sencillo confesarse a desconocidos o, como en este caso, cuando nuestra vida está en juego.

Será así cómo se desmonte la aparente vida feliz de la familia Kamiya. Se destaparán sus vergüenzas, se soltarán verdades dolorosas y nada volverá a ser lo mismo para este núcleo familiar que tan felices se las prometía. A través de cada emocionante y violento juego, las piezas se irán desmoronando… Después de todo, puede que la muerte no sea lo peor que te puede pasar en Happyland.

El sector sanitario quemado por las nefastas políticas de Ayuso.

CASQUERÍA, CASQUERÍA, MÁS GORE CADA DÍA

Happyland es autoría de Shingo Honda, un mangaka cuyo nombre posiblemente os suena ya que ha sido publicado previamente en España por Ivrea. La editorial argentina nos trajo en 2012 Hakaijuu, la obra más longeva hasta ahora del autor.

En ella, se deconstruía de la forma más carnal y violenta el tropo de los monstruos que asolan ciudades. Si Godzilla hubiera tenido muchos hijos y los hubiera dopado de esteroides, saldría algo así como Hakaijuu. En este manga, el autor ya deslumbraba con su impresionante estilo gráfico, capaz de revolver el estómago a la par que dejarnos alucinados con el detalle con el que retrata escenas violentas, descuartizamientos y casquería en general.

Happyland fue publicada en Japón en 2021, siendo una obra recopilada en dos tomos. Arechi ha decidido traernos la historia al completo de una sola tacada, una decisión totalmente de agradecer. Y es que la obra engancha una barbaridad, tiene un ritmo altísimo y, además, narrativamente supone una mejora con respecto a la anteriormente mencionada. No es que su mayor atractivo sea su trama precisamente, pero al menos en Happyland trata de darle un contexto a todo y de humanizar a los personajes. En Hakaijuu se limitaba a la acción y la muerte constante sin profundizar mucho en el porqué de las cosas.

Ojito, que además al final de esta historia hay un giro muy interesante que no vi venir. Puede ser más o menos creíble, pero desde luego ayuda a que el componente de “fantasía” de la obra tenga un sustento que le da cierto empaque.

«Esa no soy yo, mejor tápalo, es una ilusión óptica del espejo»

¡VEN A NUESTRO PARQUE, TE SENTARÁ DE MUERTE!

Happyland es un manga muy disfrutable que no os podéis perder a poco que os gusten los slasher cargados de acción, violencia y un ritmo frenético. Si la historia os importa un poco menos, a pesar de que la hay, y sois más del impacto visual y de la adicción de la trama, encontraréis aquí un buen añadido a vuestra colección.

Avisados quedáis, eso sí, de que hay imágenes violentas cada dos por tres y que la obra no es apta para estómagos sensibles. Si bien es cierto que no llega al nivel extremo de Hakaijuu, igualmente resulta impactante.

Además, y para variar, el precio está bastante bien, ya que a fin de cuentas nos ofrecen dos tomos unidos a un precio de 15,95€, lo que equivaldría a unos 8€ el tomo. Un precio que, desde luego, no es el habitual en Arechi, y uno de los motivos por los que me animé a hacerme con esta obra.

En definitiva, una historia completa en un solo tomo, rabiosamente entretenido y que os hará replantearos si, a partir de ahora, la sinceridad puede ser vuestra mejor moneda de cambio. Y es que, como diría la niña del meme, “mejor eso que morirse”.

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Sobre el autor...

Yer Wells

Lector de manga desde hace más de diez años y habitual redactor sobre este campo. Me maravillan las historias raras y busco sorprenderme en cada lectura. Lo mainstream no está reñido con la calidad.

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