Tras un agosto de tranquilidad y vacaciones, en septiembre vuelven las ilustres visitas a Omega Center con toda una leyenda del cómic mundial.
Esteban Maroto nació en Madrid en 1942 y dio sus primeros pasos en el estudio de López Blanco a mediados de los cincuenta, aunque su debut oficial no llegó hasta 1962 con El príncipe de Rodas 2ª parte, del que se encargó desde el número 21.
Tras afincarse en Barcelona en 1963, comenzó a trabajar para el extranjero, en especial para el mercado alemán, con publicaciones en varias revistas juveniles con predilección por historietas de aventuras y fantasía, géneros que le marcarían en el resto de su carrera; eso no impidió que también probara tebeos románticos, gracias a su dominio sobre la representación de la figura femenina, sobre todo para revistas británicas.
Su primer gran éxito fue Cinco por infinito, que comenzó a gestarse en 1965 y causó sensación en Estados Unidos, donde ganó varios galardones como el Academy of Comic Book Arts al mejor dibujante extranjero en 1971. Con ese impulso, creo sendas historietas de fantasía con un estilo cercano al de Conan, como Wolff, Dax the Warrior o Korsar, lo que le consolidó entre el público norteamericano.
Además de en la fantasía, también triunfó en el género del terror publicando en revistas como Creepy, Eerie o Vampirella, aunque otro de sus grandes logros fue el rediseño de Red Sonja con su característico bikini de metal, lo que le permitió entrar en la serialización de La espada salvaje de Conan con algunas historietas entintadas por el mismísimo Neal Adams.
Maroto es un todoterreno, algo que se demuestra con su aportación a la ciencia-ficción con títulos como Alma de dragón, La esfinge o Nave prisión; siguiendo con su inquietud, en los ochenta se propuso adaptar Los mitos de Cthulhu en la revista El capitán Trueno.
A partir de 1987 participó en varias series de DC Comics, como Amethyst o Atlantis Chronicles, para pasar a dibujar en los noventa en Marvel (X-Men Unlimited), Image (Zorro’s Lady Rawhide) o Topps Comics (Cadillacs and Dinosaurs), además de ser portadista de Zatanna para DC.
Desde finales de los noventa y principios de 2000, se centra en la ilustración, que recopila en algunos volúmenes como Hijos de la medianoche o Wonders, pero no olvida la historieta con obras como Brendon, CrossGen Chronicles o Vlad the Impaler. Su carrera fue reconocida en 2011, cuando fue galardonado con el Premio Oso a Toda una Vida por la Asociación Española de Amigos del Cómic.
En los últimos años, su trabajo se ha centrado en Aquaman: Las crónicas de Atlantis para DC Comics y en el regreso de Red Sonja con títulos como La balada de la diosa roja o Las crónicas de Red Sonja.
¡No te pierdas su visita a Omega Center de la calle Estrella, 20 el sábado 8 de septiembre a las 17:00h!
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