¡Bienvenidos a una nueva entrega de la sección «Detrás del anime»! Como sabéis, en ella os contamos todos los secretos y orígenes detrás de los estudios de anime. En esta ocasión, hablaremos de Studio Colorido, una productora pequeña pero que ha entrado pisando muy fuerte en el mundo de la animación. ¡Bienvenidos al mundo del color de Studio Colorido!
COLOR, CÁMARA… ¡ACCIÓN!
Quedaos con este nombre, si no lo habíais hecho ya: Hiroyashu Ishida. A lo mejor os suena por haber sido el artífice de un pequeño corto animado que se hizo viral en redes en el año 2009. El proyecto, llamado Fumiko no Kokohaku (La confesión de Fumiko) formaba parte de uno de sus trabajos para la universidad. El público reaccionó con sorpresa y admiración al saber que aquella pequeña joya era creación de una sola persona. Posteriormente, en 2010, lanzó otro corto llamado Rain Town (La ciudad de la lluvia), que también llamó la atención del mundo por su alta calidad y su especial sensibilidad.
Habiendo sido el foco de atención incluso de algunas productoras asentadas, y viendo que sus trabajos eran bien valorados, el joven decidió formar su propia empresa de animación en agosto de 2011. Le llamó Studio Colorido. Sus primeros trabajos fueron principalmente cortometrajes y videoclips. A pesar de que Ishida se rodeó de un pequeño grupo de personas de su confianza, prefirió seguir realizando labores de producción y arte, relegando la dirección a su compañero Yojiro Arai, que por cierto había trabajado con el famoso Studio Ghibli. Concretamente, Arai había colaborado como animador en producciones como Arrietty y el mundo de los diminutos, El viento se levanta o La colina de las amapolas. Ahora, habiéndose unido a Ishida en esta compañía, realiza tareas de dirección, siendo el principal responsable de las obras más recientes.
Muchos de los primeros encargos de la empresa también fueron para anuncios publicitarios. Entre otros, han colaborado con la cadena de alimentación Marukoma, con McDonald’s o, en el ámbito de los videojuegos para móviles, realizando el spot de Puzzle & Dragons para GungHo Online.
PROYECTOS DE VIVOS COLORES
Tras un tiempo aumentando su plantilla de trabajadores y ganando cierta notoriedad en el mundillo, también han realizado producciones más serias. Así, por ejemplo, tenemos Shashinkan (El estudio fotográfico), un corto de 2013 ambientado antes de la II Guerra Mundial en el que un pobre fotógrafo se las ve y se las desea para que los miembros de una familia sonrían para la foto. Posteriormente produjeron Hinata no Aoshigure (Lluvia entre los claros), en el que relatan cómo un niño enamorado de una compañera de clase trata de confesar su amor antes de que ella se mude a otra ciudad.
El salto cuantitativo lo dieron después, produciendo su primer mediometraje, Taifo no Noruda (El tifón Noruda). Este proyecto se emitió en 2015 y nos narra una extraña aventura en la que dos amigos, que se han quedado encerrados en su instituto debido a una amenaza de tifón, conocen a una extraña y misteriosa chica.
En todas sus producciones, resulta innegable la influencia que han tenido en Studio Colorido grandes directores como Miyazaki, Hosoda o Shinkai. Una de la máximas de este estudio es la de «hacer un lugar donde las personas involucradas en un anime puedan trabajar pacíficamente y contribuir al buen desarrollo de la animación japonesa».
Por cierto, su nombre, como muchos supondréis, proviene en efecto de palabra española «colorido», que significa «rico en color» o «que contiene diversidad de colores».
SUS PRINCIPALES TRABAJOS
A pesar de su juventud (recordamos que fue fundado en 2011), el estudio ya cuenta en su haber con algunas producciones más que destacables e incluso de populares franquicias.
Además de todos los trabajos mencionados anteriormente en este artículo, han tenido la oportunidad de animar una obra del conocido autor de Bleach, Tite Kubo. Su última propuesta, Burn the Witch, ha sido animada por Studio Colorido. Y lo hace con notables resultados, aportando a la obra un dinamismo impresionante y creando un mundo rico en detalles y colores que parece vivo en cada fotograma, mejorando si cabe el manga original.
Y eso no es todo, también han tenido la ocasión de trabajar en productos animados de una de las franquicias más importantes a nivel internacional. Sí, hablamos de Pokémon. Y es que son los encargados de la serie Pokémon: Alas del Crepúsculo, una serie de 8 capítulos exclusivos online que siguen las andanzas de varios personajes en la región de Galar.
Tampoco podemos olvidar Amor de gata, uno de sus proyectos más recientes, una película romántica con toques de fantasía que podéis disfrutar en Netflix y así conocer cómo trabaja esta productora.
Como veis, Studio Colorido ha entrado por la puerta grande, impregnando de vivos colores y belleza a todas sus producciones, sorprendiendo y cautivando a una industria en la que, como demuestran, todavía es posible destacar e impresionar al público. Desde aquí, les deseamos los mayores éxitos y que sigan con su excelente labor.
¿Qué os ha parecido esta entrega de «Detrás del anime»? ¿Conocíais a Studio Colorido? ¿Qué obra os gusta más? ¡Os leemos en redes!
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