Poco a poco se va asentando en nuestro mercado el manga autobiográfico. Narraciones en las que los autores y autoras nos cuentan su vida, o parte ella, a la vez que nos muestran cómo se sienten o los pensamientos que les rondan por la cabeza. Esta clase de obras siempre nos ha llamado la atención. Nos parece muy interesante lo atrapantes que son y cómo consiguen que sientas una conexión profunda con los artistas. Es por ello que en el artículo de hoy queríamos hacer una reflexión.
Os contamos qué tiene el manga autobiográfico que tanto nos atrae y porqué le damos tanto valor, especialmente en la época en la que vivimos. Sin más dilación, ¡comenzamos!
LAS CONFESIONES MÁS PERSONALES
Sin duda algo que llama la atención desde el principio, que consideramos uno de los pilares esenciales de este tipo de obras, es la sinceridad con la que los mangakas relatan sus vivencias. Al adentrarnos en sus vidas nos volvemos partícipes de sus recuerdos más devastadores, pero también de su crecimiento personal. Es imposible no sentirse identificados con ellos en algún momento, pues aunque no hayamos pasado por las mismas situaciones, los sentimientos están ahí y los conocemos perfectamente.
Es el tipo de historia que nos hace darnos cuenta de que no estamos solos en el mundo. Hay gente que, desde tan lejos como Japón, nos están diciendo que ellos también sufren y se decepcionan, pero que consiguen superarlo o recuperarse de alguna manera. No son la gente perfecta que vemos todos los días en las redes sociales. Cometen errores, hieren a sus seres queridos y caen a lo más bajo. Son humanos que sienten, padecen y que, por encima de todo, necesitan desahogarse. A través del arte expresan todo lo que llevan dentro, con la esperanza de que alguien lo lea y pueda sentirse aunque solo sea mínimamente identificado con ellos.
Funciona a la perfección, pues el manga autobiográfico es un pedazo de vida rebosante de todo aquello que el artista sintió en su momento. Es digna de admirar la forma en que se abren al lector y confiesan sus sentimientos más profundos, sin duda alguna esos que muchos no nos atreveríamos a confesar ni a nuestros seres queridos. El ponerse a dibujar y revivir esas situaciones no debe ser nada fácil, y por ello los apreciamos incluso más. Precisamente por eso es tan fácil empatizar y ponerse en la piel de quien lo sufre, aunque nunca podamos llegar a comprender del todo lo que se siente si no lo hemos vivido.
UNA FORMA DE APRENDIZAJE
Otro punto que queríamos resaltar respecto al manga autobiográfico es que es una forma de aprendizaje más. Quizás no en el sentido más académico de la palabra, pero sí en el que realmente importa. Y es que a través de ellos adquirimos una valiosa cualidad, la empatía. Con el ritmo de vida que se nos impone en la actualidad, es algo en lo que no pensamos realmente día a día. Las noticias nos bombardean con negatividad, pero tenemos pocas ocasiones para recapacitar sobre lo que otras personas están padeciendo y cómo les afecta.
En mangas como Mi Experiencia Lesbiana con la Soledad nos ponemos en la piel de alguien que sufre depresión, en La Novia era un Chico la autora nos lo cuenta todo sobre su transición y lo duro que fue para ella que la reconocieran por quien realmente es. Son solo un par de ejemplos, pero ambas son obras muy importantes y necesarias a día de hoy. Las redes sociales pueden llegar a frivolizar con este tipo de temas, hacer que nos posicionemos en un lado u otro como si se tratara de una elección. Tan solo leer las historias de gente real, que nos cuentan sus pensamientos y sentimientos, con la mente abierta, nos puede ayudar muchísimo a comprender que la vida de las personas es más importante que cualquier otra cosa.
¿Qué mejor forma de comprender la realidad que a través de los propios seres humanos? Es algo que valoramos inmensamente de estos mangas y no podemos más que agradecer a los increíbles autores y autoras que se esfuerzan por abrir sus corazones y compartir su intimidad con los lectores. Si la idea de las obras autobiográficas os echa para atrás por cualquier motivo, sabed que son obras muy dinámicas e interesantes, que os van a enganchar y os van a aportar más de lo que imagináis. ¡Esperamos que este artículo os anime a darles una oportunidad!
ALGUNOS AUTORES QUE RECOMENDAMOS
No podíamos finalizar este artículo sobre mangas autobiográficos sin recomendaros algunas de nuestras obras favoritas. Una de las editoriales que primero comenzó a traerlas, y que lo sigue haciendo a día de hoy, es Fandogamia. Las más destacadas son las obras de una de las autoras más famosas de Japón, Kabi Nagata. Ella inició su andadura publicando tiras sobre su vida de manera online, adquiriendo inmensa popularidad. Sin duda os la recomendamos si no sabéis por donde empezar. Sus mangas son muy dinámicos, tiene gran facilidad para plasmar sus sentimientos y no se corta nada. Se abre en canal para el lector y nos deja con la boca abierta. Mi Experiencia Lesbiana con la Soledad es su primer volumen, ¡y es brutal!
También ha sido Fandogamia quien ha licenciado otro de los mangas de los que os hablamos en este artículo, La Novia era un Chico. En él Chii nos cuenta sus experiencias como mujer trans, desde la forma en que siente ella, cómo la ve la sociedad y su jornada transicionando. Es una obra muy importante, educativa y sobre todo sincera. El estilo de dibujo es precioso y el tono de la obra es amable y esperanzador, por lo que es una lectura agradable y bonita.
Por otro lado, Odaiba también publicó un manga muy interesante, Descubriéndonos despiertos: Crecimos con trastornos del desarrollo. En él nos cuentan nueve historias reales de personas que han sido diagnosticadas, cómo ello ha afectado a su niñez y cómo se traduce en su vida adulta. ¡Otro manga que merece mucho la pena leer!
No podíamos despedir este artículo sin recomendaros la última licencia de una autora nacional. Lizth Bianc nos cuenta en Mi Vida sin Rosa su experiencia creciendo como mujer en una sociedad patriarcal. Veremos las formas en que le ha afectado el concepto de la mujer que tienen la sociedad y las personas de su entorno. Cómo ello la llevó a rechazar su propio género aun siendo una mujer cis. Es una historia dura por momentos, pero muy necesaria y contada de una forma que casi se lee sola. Es fácil entender lo que Lizth nos quiere mostrar y empatizar con ella, ¡queda más que recomendada!
Hasta aquí el artículo de hoy, ¡esperamos que os haya gustado! ¿Conocíais las obras de las que os hablamos? ¿Sois tan fans del manga autobiográfico como nosotros? Dejadnos vuestra opinión en comentarios, ¡os leemos!
Comentar